Con la llegada del nuevo año muchos serán los proyectos que surgirán estos días, no dejéis para última hora todas las decisiones importantes, tan bueno es tener un gran material para imprimir, como encontrar un grupo de profesionales que sepan lo que quieres en cada momento.

A continuación, desde Macrolibros, os voy a detallar los que creo que son los 4 pasos a tener en cuenta en la búsqueda de tu imprenta ideal, la que resuelva tus dudas, que cree su arte y transforme tu pdf en “magia” creando el libro soñado.

Muchos son los que desconocen lo que hay detrás de la fabricación de un libro, conocer sus partes es tan importante como tener el proyecto. Las más fundamentales a controlar, de manera muy resumida, serían las siguientes:

Podría decirse que es lo que se ve del libro cerrado, la portada, la contraportada es la parte de atrás que suele traer un resumen del libro con la foto del autor.

Hablaremos de cubierta cuando sea un papel ligero para un libro rústica (libro de bolsillo, flexible) o de tapa dura cuando sea un cartoné (libro de lectura de portada hecha de cartón duro). Las solapas en los libros que no son de tapa dura son las partes que se abren con más información y dan un aspecto más robusto a los libros de tapa blanda (flexbinders) o rústicas.

La primera imagen cuenta mucho, se usan papeles más fuertes y podemos tener muchos acabados para embellecer la obra: plastificados, estampados, barnices…

Guardas llamamos a la primera hoja y ultima de los libros, solo en los de tapa dura de cartón. Es la hoja que se pega a la tapa y la primera del libro, todo libro consta de 2 dípticos, la delantera y la trasera.

El lomo es la parte del libro que se encuentra entre la cubierta y la contracubierta, siendo su función la de unir ambas partes con las páginas del libro. Nos los encontramos rectos o curvos, esto lo pide específico cada autor para su obra.

Y el taco es el conjunto formado por las páginas, el interior en realidad del libro. No está a la elección las secciones del mismo, esto también se selecciona antes de la impresión de las páginas (en pliegos).

Si veis un libro de tapa dura, el refuerzo de color que se pone entre el interior y la tapa es lo que llamamos cabezada y se elige de entre una amplia carta de colores, todo es personalizable.

Hendido es la fisura o marca en los libros blandos de bolsillo, se pueden fabricar con o sin él.

Cualquier cosa que embellezca al libro hay que presentarlo junto al proyecto, podemos poner desde fajas (la cinta decorativa que lo envuelve), sobrecubiertas (la hoja que lo envuelve para protegerlo), puntos de lectura (cintas de raso que cuelgan del libro para señalar la lectura), stickers, pegatinas, cd….

La calidad es lo que importa, así como la satisfacción de los clientes, para ello la medición del color es fundamental en cada uno de los trabajos.

La calidad se construye desde la primera toma de contacto con nuestra obra, por ello implicar a todos los trabajadores controlando cada proceso en la imprenta es esencial. La calidad hay que producirla, no controlarla, por ello creo que si en cada paso de la cadena el propio empleado controla su producción minimizamos riesgos innecesarios en cada proyecto.

La medición de color hoy día se rige bajo unos estándares de calidad ISO, por lo que no puedes medir el color de tu trabajo por lo mostrado en una pantalla, debes pedir acreditación y exigir si es necesario pruebas de color (impresiones reales de cómo quedará el trabajo).

En el momento de hacer un presupuesto es donde deben aclararse todas estas dudas, incluso con los técnicos de Pre-impresión que serán los que vean los archivos, estos pueden aconsejar de manera personalizada.

¿Necesitas un color especifico?, no dudes en pedirlo, las cartas de Pantone pueden ayudarte, son conocidas como guías Pantone o pantoneras.

Tener en cuenta también si se cuenta con certificados CAS, PEFC y FSC ayuda mucho a nuestra elección si necesitamos los sellos adecuados para nuestro trabajo.

El gran olvidado de muchas imprentas preimpresión, el laboratorio, son los que obran la magia de transformar un archivo en las planchas que imprimirán los proyectos.

Hay que tener cuidado en la elección, pues no todas cuentan con diseñadores ni maquetistas propios. Muchos desconocen lo que ocurre tras la entrega de sus proyectos.  En resumen, se procede a un montaje distribuyendo las paginas por formas en un pliego para filmarlo en una plancha de aluminio que servirá de soporte en las máquinas de impresión.

Las máquinas de impresión de offset (4,5 y 8 colores) o de rotativa, dependerán a la hora de marcar la elección de tu imprenta, y arrancarán para tus trabajos. No es lo mismo una tirada de 3.000 libros de color que un premio editorial de 100.000 en blanco y negro, cada mercado tiene una imprenta distinta, así como un precio.

Los tiempos que corren han hecho que el sector se diversifique, pero dependiendo de tu trabajo tendrás que buscar un taller u otro, algunos se especializan en publicidad y es posible que cuenten con cartelería y grapa mientras que, los más grandes tendrán todo tipo de maquinaria para fabricar tus obras. Preguntar y pedir presupuestos será la tónica general.

En definitiva, tener un buen proyecto no lo es todo, también hay que tener tiempo y buscar cual será la mejor elección a la hora de encargar tu trabajo.

Eso sin olvidar al equipo que haya detrás de cada empresa, la proactividad, que hablen en tu idioma y compartan tus proyectos será un plus para tu trabajo.